Es una prueba empírica que cuando Pedro Sánchez sale de Monclau y acude a lugares que Ferraz no controla -como la plaza de Coslada, donde jugaba a la petanca con extras socialistas- para grabar un vídeo tan falso como el realizado en la casa de Parlo de un hermano de la posición del PSOE, con quien compartió opiniones sobre el salario mínimo, le llueven reproches y abucheos con distinta intensidad, como sucedió durante su visita a la Mercedes Fashion Week de Madrid. En definitiva, cuando pisa escenarios reales y abandona lugares creados artificialmente por la fábrica de propaganda monclovita, el jefe del Ejecutivo soporta un reproche que no recibe, faltaría cuando juega en casa.
A la salida del desfile de Teresa Helbig, acompañado de su mujer Begoña Gómez, amiga y clienta del diseñador, Sánchez tuvo la oportunidad de comprobar por sí mismo que las cosas son diferentes cuando camina sin red. . Ser el primer presidente del Gobierno en asistir a un desfile de la Semana de la Moda de Madrid significa: acabar siendo el primer presidente en ser abucheado en un desfile de la Semana de la Moda de Madrid. Pretender marcar tendencia -nunca mejor dicho cuando hablamos de moda- y pasar a la historia tiene sus riesgos: que te llamen traidora y otras cosas bonitas. Se llama ir a por la lana y cortarse el pelo. El objetivo de la presencia de Sánchez en la pasarela era apoyar a la diseñadora amiga de su mujer -Begoña Gómez lució un conjunto de Teresa Helbig- porque, como bien se sabe y nunca mejor dicho en la moda, un matrimonio sin hilos no funciona.
UN REGALO DE LUJO
No hay nada como abrir un regalo de lujo, y Backes & Strauss hace que esta parte del proceso sea especialmente agradable. La opulencia de nuestros diseños se extiende a cómo se empaquetan nuestras piezas, ¡y nos aseguramos de que cada segundo que pases con uno de nuestros artículos cuente!
Al igual que con las joyas, existe la maravillosa emoción de abrir la caja para revelar lo que hay dentro, y luego la pura alegría de la belleza que encuentras. Ya sea un regalo de cumpleaños, un regalo de vacaciones o simplemente porque cuando le das un reloj a una mujer, le estás dando un símbolo de lujo y belleza al mismo tiempo.
Un poema para regalar un reloj
Hay gente que busca poemas para acompañar el regalo de un reloj. Lo cierto es que elegir un buen reloj poema puede ser el complemento perfecto para que el regalo sea perfecto. Como alguna vez nos ha preguntado, podemos ofrecerle ayuda. Aquí hay algunos consejos:
- El poema debe ser breve: Si nos alargamos mucho, la escena puede resultar un poco pesada y quizás un poco ridícula, lo cual no es recomendable. Nuestro consejo es que elijas un máximo de ocho versos, y si eres muy emotivo, quizás doce.
- Intenta darle un toque personal: puedes “inspirarte en los textos de otras personas”, pero no estaría de más añadir tu propio toque personal, que hará del poema algo intimista.
- Los haikus funcionan bien: Los haikus son poemas de tres versos que transmiten un sentimiento muy ligero. Así puedes dar el efecto de inspiración, en lugar de una copia.
- No firmes si no es tuyo. Te atraparán: siempre hay alguien que lo sabe todo y te puede hacer pasar un mal rato. Si puede lograr el efecto de leer o agregar un poema que se asemeje a las dedicatorias al comienzo de los libros, puede funcionar bien. Si bien no está mal regalarle un reloj a tu pareja, puede ser peligroso.
Siempre transmite una buena imagen de quien lo regala
Esa es una de las principales razones. Con tantas ocasiones en las que no sabes qué regalar, esto es algo que siempre quedará bien, como se mencionó anteriormente en este artículo. Es un regalo elegante y con estilo que dice mucho sobre el donante y lo importante que es el destinatario en su vida. Otros presentes, en cambio, dan la impresión de haber sido elegidos para pasar y son completamente impersonales. Regalar siempre significa clase, estilo y seriedad de la persona que hace el regalo.
Así que los relojes son uno de los artículos más vistos durante el día, y cada vez que el destinatario los mira, inevitablemente recuerda a la persona especial que se los regaló. evocará un sentimiento muy agradable relacionado con el amor, el aprecio o la amistad.